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jueves, 4 de octubre de 2007

Ismael Serrano - Últimamente




ÚLTIMAMENTE
Últimamente ando algo perdido,
me han vencido viejos fantasmas,
nuevas rutinas.

Y en cada esquina acecha un ratero
para robarme las alhajas, los recuerdos,
las felicidades.

De un tiempo a esta parte
llego siempre tarde
a todas mis citas.

Y la vida me parece una fiesta
a la que nadie
se ha molestado en invitarme.

De un tiempo a esta parte
me cuesta tanto, tanto, tanto, no amarte,
no amarte.

Últimamente ando desconcertado,
así que ponte a salvo, porque en este estado
ando como loco.

Y me enamoro de mujeres comprometidas,
llenas de abrazos,
llenas de mentiras.

De un tiempo a esta parte, a mi amor propio algo le falta,
lo has dejado unos puntos
por debajo del de Kafka.

Y la vida me parece una fiesta
a la que nadie
se ha molestado en invitarme.

De un tiempo a esta parte
me cuesta tanto, tanto, tanto,
me cuesta tanto no amarte.

Últimamente planeo una huida
para rehacer mi vida,
probablemente en Marte.

Seguro que allí no hay nadie empeñado en aconsejarme:
"Ismael, ¿qué te pasa?
No estudias, no trabajas".

Y qué vamos a hacerle,
si es que últimamente ando algo perdido,
si te necesito.

De un tiempo a esta parte
me cuesta tanto, tanto, tanto,
me cuesta tanto no amarte.

Han de venir tiempos mejores,
cometeré más errores, daré menos explicaciones,
y haré nuevas canciones

en las que te cuente cómo, últimamente,
son tan frecuentes tristes amaneceres
ahogando mis finales,

repetidos, cansados,
miserables,
llenos de soledades.

De un tiempo a esta parte
me cuesta tanto, tanto,
me cuesta tanto no amarte.

lunes, 17 de septiembre de 2007

Ismael Serrano - Casandra



Casandra


Casandra vió en sueños el futuro,
en la sombra de una pesadilla Casandra leyó,
los versos de ese poema que aún no han escrito,
los dioses que riendo la hirieron con su maldición.
Supo del hambre y de las guerras de siempre,
de bufones celebrando el odio bailando entre hogueras,
de despedidas y de monstruos minerales,
bebiendo insaciables la savia dulce del planeta.

Casandra vio a hombres y mujeres,
dormitando en sus burbujas,
trás las máscaras del miedo,
Más también vio,
la luz del alba asomar por la cancela
que nadie jamás abrió.
Supo que aún quedaban esperanzas,
que otros sueños la esperaban,
Casandra habló, a todos de sus sueños, más nadie la oyó.

Nadie creyó en Casandra y sus visiones,
y la gente sólo vio en su augurio delirio y locura,
la condenaron a vagar perdida y sola,
herejía es mostrar la verdad descarnada y desnuda.
Abandonada tras los años la encontró,
un muchacho que andaba buscando esperanza y respuestas,
Casandra habló con pasión de sus presagios,
y de la luz del amanecer brillando tras la puerta.

"Creo en ti Casandra no estas loca",
Se besaron y en su boca,
florecieron madreselvas,
"Dulce Casandra ponte de pié,
yo te he conocido antes, quizá te soñé".

Hay quien duda ya y cree en la leyenda,
juntos buscarán la puerta.
Dulce mañana, yo no sé tú,
Creo en Casandra.

Hay quien duda ya y cree en la leyenda,
juntos buscarán la puerta.
Dulce mañana, yo no sé tú,
Creo en Casandra.